Tal madrugada como hoy, en 1934, Alemania es testigo de «la noche de los cuchillos largos» u «operación colibrí». Tuvo lugar entre el 30 de Junio y el 2 de Julio y fue una ola de asesinatos cometidos por el Partido Nacionalsocialista Obrero para apoderarse de todas las estructuras del Estado alemán.
Muchos de los que fueron asesinados esos días pertenecían a las Sturmabteilung (SA), una organización paramilitar nazi. Adolf Hitler se opuso a las SA y a su líder, Ernst Röhm, porque el dirigente alemán percibía la independencia de las SA y la inclinación de sus miembros hacia la violencia callejera como una amenaza contra su poder. Murieron al menos 85 personas durante la purga, aunque el número total de fallecidos pudo ascender a cientos, y más de mil oponentes al régimen fueron arrestados. La mayor parte de los asesinatos los llevaron a cabo las SS (Schutzstaffel), un cuerpo de élite nazi, y la Gestapo (acrónimo de Geheime Staatspolizei: ‘policía secreta del Estado’).
Para saber más…
La noche de los cuchillos largos