Tal día como hoy, en 2008, durante una conferencia de prensa en el Palacio del Primer Ministro Nuri al-Maliki en Bagdad, capital del ocupado Irak, el periodista Muntadhar o Muntazer al-Zaidi arrojó sus zapatos al entonces presidente de los Estados Unidos, George W Bush. «Este es un beso de despedida de la población iraquí, perro», gritó al-Zaidi en árabe mientras le lanzaba el primero de sus calzados al jefe de Estado.
«Esto es por las viudas y los huérfanos, y todos aquellos muertos en Irak», vociferó mientras le tiraba el segundo. Bush, demostrando rápidos reflejos, se agachó dos veces para evitar sendos zapatazos. Lo detuvieron y fue puesto en libertad el 15 de septiembre de 2009. Según sus declaraciones, después de detenerlo, le pegaron, le mantuvieron su cabeza bajo el agua simulando que lo ahogaban y le abandonaron al frío nocturno y a la intemperie durante las 24 horas posteriores a su arresto en diciembre…